Desde que empezó la pandemia y a medida que la inseguridad se establecía en nuestro día a día, la palabra e-commerce iba tomando protagonismo, y por eso no es de extrañar que cada vez sea más frecuente que los fotógrafos posteen frases que digan “haciendo fotos para e-commerce”, “trabajando para e-commerce” u “¡hoy sesión de e-commerce!”.
Pero… ¿Qué es realmente una sesión de e-commerce? Esto me ha llevado a escribir este artículo ya que considero necesaria su correcta definición para comprender bien todo lo que conlleva, ¡vamos a ello!
Creo que la fotografía e-commerce tiene unas características únicas que implican un tipo de trabajo concreto y claramente delimitado, donde el fotógrafo tiene un margen muy marcado en la producción de las imágenes.
La cantidad de profesionales que aseguran hacer imágenes para e-commerce están confundiendo términos con dos tipos de fotografía: fotografía de producto para medios online y e-commerce. Estos dos conceptos difieren en varios aspectos que te explico a continuación.
¿Dónde está la diferencia?
Hasta ahora los tipos de fotografía se han diferenciado según su finalidad, por ejemplo, fotografía de moda, arquitectura, de reportaje… Es decir, la imagen final determina cómo categorizamos el tipo de fotografía. En este punto considero que ha habido un cambio fundamental. En el caso de la fotografía para e-commerce es el proceso de producción el que marca que esas imágenes sean para e-commerce, siendo prácticamente la misma finalidad.
Creo que es de las pocas áreas de la fotografía donde se cataloga según el método de producción y no únicamente por su finalidad.
Recordemos que es muy diferente realizar fotografías para difusión online que fotografía e-commerce, ya sean fotografías de bodegón, de producto life style, etc. Estas fotos serán publicadas en tiendas online, redes sociales y demás medios electrónicos. En este caso decimos que estamos realizando fotografía de producto para medio online.
E-commerce vs. Fotografía de para medio online
Muy probablemente la creación de las imágenes para medios online se hará afrontando la producción de una manera diferente, pensando en el resultado final y gestionando el tiempo de producción de una manera determinada.
Sin embargo, cuando hablamos de fotografía para e-commerce estamos hablando de un tipo de fotografía que tiene unas características productivas únicas.
E-commerce: puntos clave que la condicionan
No olvidemos que la fotografía de e-commerce se caracteriza por el gran volumen de imágenes que conlleva producir. Por ello uno de los puntos clave es la correcta definición y diseño de los grupos de trabajo involucrados en la creación de estas imágenes.
Desde la entrada del producto en el almacén hasta la publicación online, el control de todos los procesos es fundamental y crítico.
Un pequeño fallo en la catalogación puede generar ventas erróneas, y una pérdida considerable de tiempo a la hora de realizar las correcciones. Esto nos generará una disminución en el margen de venta de dicho producto, en lugar de transformar la gestión del tiempo en una ventaja competitiva.
Un fallo en la captura conlleva un aumento del tiempo del retoque en muchas ocasiones supeditado a la percepción del retocador con la posibilidad de aumentar el error en el producto.
Plantear la sesión de trabajo como una escena conjunta de todos los pasos en la creación de esta marcará la diferencia y nos permitirá ahorrar tiempo, recortando segundos a la producción. Estos segundos se convierten en horas de trabajo extra conforme aumentan los productos a fotografiar.
Txomin Ruiz de Larramendi
La fotografía e-commerce conlleva una organización en la producción completamente diferente a otros tipos de fotografía, una cadena preparada para ingerir grandes volúmenes de imágenes.